martes, 24 de noviembre de 2009


No sé si realmente mis alternativas estan tan cerca como lo había supuesto toda mi vida, no creo que tampoco pueda llegar a ellas con tanta facilidad como lo hace la gente que tiene esa indiscutible habilidad de llegar a las cosas importantes, antes de que ellas llegen a nosotros. Son pequeñas, las cosas que nos importan, pero a la vez son tan grandes que con solo conseguirlas llenariamos todo nuestro pecho y conseguiriamos calmar toda esa ansiedad que nos come minuto a minuto.

Los ataques de rabia, no son, nada menos que un paso para llegar a nuestra felicidad. La cólera, las ganas de llorar, todas esas cosas que nos parecen negativas podrian llegar a significar el paso anterior para conseguir lo que realmente esperamos cada uno de nosotros, la alegría.

Yo no soy nadie para discutir lo que tu piensas, pero si que soy alguien que podría decirte que alomejor, si solo te pararas a pensar en lo que realmente sientes y piensas, te darías cuenta de que eres muy diferente que a toda la gente que te envuelve, simplemente porque lo que realmente queremos, está en lo que realmente pensamos y sentimos y eso, por miedo, está encerrado, tan encerrado que no nos dejan ver las millor de alternativas que podemos tener. Nos las privan, nos encierran en una cárcel llamada cerebro, donde esté nos controla cada paso, cada letra, cada sílaba, cada palabra, cada frase.

No voy a dejar que nadie me controle, porque ahora es mi turno, y mis alternativas estan por llegar.

domingo, 15 de noviembre de 2009

Querida Alicia,

Hace unos días volví a la Normandía, todo sigue exactamente igual desde que los dos la dejamos. La hierba de los inmensos prados aún brilla y muchísimas vacas pasturan por donde tú y yo jugábamos al escondite. Volví a pasear por la arena que envuelve el Mont Saint Michel, creí que veía tus pasos y los míos aún ahí, estancados en el tiempo.

Volví a casa, seguía todo igual, el pequeño salón con su chimenea y encima de ella, nuestra foto. Mi habitación llena de cuadros de ti, sigue ahí y no sé como pero al ver tu cuerpo junto a tu alma plasmados en ese trozo de tela, me entró la inspiración y ya ves, en poco recibirás otro. Otro de los tantos que debes tirar cada año.

Aún se percibe ese olor característico de esa casa, el que impregnabas tú por cada rincón de los que ibas. En poco tiempo, he comprendido lo que importa y lo que no.

Tu partida hizo que te entendiera mejor y que supiera entenderme. No te doy las gracias aún así, porque ha pasado mucho tiempo y ya lo tendría que haber echo. Tampoco te voy a decir que te echo de menos, porque es eso lo que quieres oír, y yo no seré esa persona la que te lo diga, ni un te quiero ni nada.

¿Entiendes tú el amor? Queda muy lejos de todos nosotros, ya.

Pero aún así, alguna vez, aunque fuera solo una, me gustaría volver a recordar, a tumbarnos en la hierba y a pensar, los dos juntos, pero sin hablar, como si fuéramos fantasmas. Sin mentiras, ni evidencias. Tu, yo y las dos máscaras, como antes. Como siempre.

My Playlist


MusicPlaylistRingtones
Create a playlist at MixPod.com